El Zinc es un oligoelemento esencial para el cuerpo humano. Está presente en mínimas cantidades en las células, pero es indispensable para el normal funcionamiento del organismo. A diferencia de otros micronutrientes, nuestro cuerpo no tiene la capacidad de almacenarlo, por lo que el consumo de Zinc en cantidades adecuadas debe ser diario.
La RDA o ingesta dietaria recomendada es la siguiente:
- Mujeres (19 años y más) – 8 mg
- Hombres (19 años y más) – 11 mg
Esta cantidad se estima para el consumo de Zinc a través de alimentos y suplementos. El Zinc tiene un UL o nivel máximo de ingestión tolerable de 40 mg para adultos.
Según estudios recientes, en el caso del Zinc y la relación con su función en el sistema inmune, la dosis diaria a consumir debería ser mayor a la que se maneja actualmente (3). Esto, según indican, es porque algunos poblacionales tienen un consumo inadecuado de micronutrientes y sus reservas podrían verse afectadas por factores de salud (estrés, infecciones) y también por factores como la contaminación ambiental.
Algunas funciones relevantes del Zinc en nuestro organismo:
- Ayuda a tener un sistema inmune saludable (3, 4, 5, 6, 13, 18, 19)
- Ayuda en la fertilidad masculina (30)
- Participa en la síntesis de proteínas y de material genético (ADN) (10, 11)
- Favorece la división celular (10, 11, 13)
- Podría ayudar a prevenir la Diabetes Tipo 2 (33)
- Niveles adecuados en la sangre podrían ayudar a prevenir enfermedades como el Alzheimer (32)
- Evita daños en la visión en edades avanzadas (8, 9)
- Permite un funcionamiento normal del sentido del gusto y del olfato (16, 17)
- Durante el embarazo, la infancia y la adolescencia es un mineral necesario para el normal desarrollo corporal (10, 13, 14, 15)
- Participa en la renovación constante de la piel y también en la cicatrización de heridas (7, 12, 18, 23)
- Es coadyuvante en el tratamiento contra el acné (24, 25)
Inmunidad:
Dentro del sistema inmune el Zinc juega un rol fundamental, ya que regula la función de la células inmunitarias y es capaz de influir en las vías de señalización que estas utilizan (18).
Cuando tenemos deficiencia de Zinc, nuestro sistema inmune deja de funcionar de manera eficiente, afectando a todas las células del sistema inmunológico, pero principalmente a las células T y a los anticuerpos. Esto genera un desbalance en la respuesta inmune que aumenta las posibilidades de infecciones y enfermedades (4, 5, 18).
Por otra parte, el exceso de este mineral (poco frecuente) afecta la inmunidad de forma bastante parecida a si existiera déficit: se activan los macrófagos (células encargadas de la fagocitosis, es decir, de destruir cuerpo extraños), y se suprime al actividad de las células T y B. Es este uno de los motivos por los cuales existe un UL o nivel máximo de ingestión tolerable (18).
Según estudios recientes, en el caso del Zinc y su función en el sistema inmune, la dosis diaria a consumir debería ser mayor a la que se maneja actualmente como RDA (3).
Salud de la piel:
A lo largo de toda la vida, la piel se está renovando de forma permanente. Este proceso de renovación requiere una serie de enzimas y proteínas que en su mayoría son a base de Zinc (23). La necesidad de estas sustancias aumenta considerablemente ante la necesidad de reducir inflamación y realizar procesos de cicatrización.
Normalmente el uso de Zinc para la piel es tópico; sin embargo, en casos de afecciones más graves como el acné, se utilizan fármacos que en su mayoría tienen numerosos efectos secundarios, como sequedad en las comisuras de la boca, nariz, descamación de la piel, y otros más graves, como defectos fetales. Es aquí donde según estudios el Zinc suplementario cobra importancia, porque es eficaz en tratar afecciones de la piel, no tiene efectos secundarios sistémicos, y además el costo de adquirirlo es menor (24).
Un meta-análisis que revisó la asociación entre los niveles de Zinc y Cobre en 891 pacientes de Vitiligo y 1.682 individuos sanos, confirmó que los pacientes de Vitiligo tenían menores concentraciones de Zinc/Cobre en la sangre que los individuos sanos (31).
Se ha estudiado que el déficit de Zinc en la dieta provoca daños en la piel, como dermatitis en distintos grados, acné, demora en la cicatrización, entre otros (23).
Estudios recientes han determinado que pacientes con acné tienen deficiencia o niveles considerablemente más bajos de Zinc en comparación a los grupos de control.
Al ser tratados con Zinc suplementario, y tras mejorar sus niveles séricos, estos pacientes tuvieron una mejora considerable de las inflamaciones cutáneas producidas por el acné (25).
FOOD FIRST: Algunas fuentes de Zinc en alimentos
RDA:
- Mujeres (19 años y más) – 8 mg
- Hombres (19 años y más) – 11 mg
Fuentes de origen vegetal:
- Semillas de maravilla o girasol – 6 mg/100 gr
- Semillas de chía – 4,6 mg/100 gr
- Avena – 4 mg/100 gr
- Nueces, almendras tostadas – 2,8 mg/100 gr
- Pistacho – 2,2 mg/100 gr
Fuentes de origen animal:
- Carne molida de vacuno, 5% grasa – 6,86 mg/100 gr
- Hígado de vacuno – 5,3 mg/100 gr
- Queso parmesano – 4,2 mg/100 gr
- Sardinas en conserva – 1,4 mg/100 gr
- Huevo – 1,24 mg/100 gr
¿Alcanzamos los niveles óptimos de Zinc a través de la dieta?
No es difícil lograr cumplir con las recomendaciones, pero a la vez depende de varios factores.
Cumplir con la dosis diaria mínima de Zinc puede ser de fácil o difícil acceso según la dieta que se lleve.
Una persona que consume carnes rojas (u ostras) a diario podría efectivamente alcanzar su requerimiento a través de su alimentación habitual. Sin embargo, una persona que no consume carne a diario, o que es adherente a una dieta vegetariana o vegana y cuya fuente de proteínas son esencialmente las legumbres, tendría que consumir una gran (y poco realista) cantidad de legumbres a diario para alcanzar su objetivo mínimo.
Un hombre vegano, mayor de 19 años, tendría que consumir alrededor de 5 tazas de garbanzos al día para lograr el requerimiento base. Esto es sin considerar cuáles podrían ser los niveles óptimos para que el Zinc cumpla con su rol inmune (3).
A diferencia de otros minerales, el cuerpo no almacena Zinc, por lo tanto su aporte debe ser diario.
Según NHANES 2017-2018, encuesta alimentaria realizada en la población norteamericana, el consumo promedio de Zinc en hombres mayores a 20 años es de 13 mg., y en mujeres 11,1 mg., alcanzando así las recomendaciones diarias (26).
Según los datos de la Encuesta Nacional de Ingesta Dietética (ENIDE 2011), realizada en España, el Zinc consumido en promedio por hombres varía entre 10 y 12 mg. al día, mientras que las mujeres que tienen un consumo de entre 8 y 9 mg./día, bordeando las recomendaciones mínimas.
Los valores chilenos para el consumo de Zinc fueron evaluados en la Encuesta Nacional de Consumo Alimentario, ENCA 2010. En ella se destacó que en promedio los chilenos consumen 10,5 mg de este mineral al día, siendo equivalente el consumo promedio para hombres y mujeres, estando al borde de cumplir con las recomendaciones mínimas.
Cabe destacar que los valores nacionales son promedios, y no consideran dietas especiales, y fueron evaluados hace más de 10 años.
Si bien el Zinc se encuentra en alimentos vegetales, su biodisponibilidad es menor, y además su absorción se ve inhibida por los fitatos, compuestos que contienen las legumbres y cereales integrales, alimentos importantísimos en la dieta de los vegetarianos. Publicaciones dicen que, debido a esto, las personas adherentes a este tipo de dietas, tendrían un requerimiento de hasta un 50% más que la RDA habitual (27).
El Zinc en los suplementos
Como suplemento, el Zinc puede ser encontrado en diversas presentaciones. Dependiente de su formato es cómo se relaciona (y compite) con otros factores dietéticos a nivel intestinal, por lo tanto su formato es clave para determinar su capacidad de ser absorbido por nuestro organismo.
Dentro de los formatos más utilizados en la industria están el sulfato, acetato y gluconato de Zinc. Suelen ser los formatos más baratos de elaborar y todos ellos tienen porcentajes bajos de absorción (2).
En Basics usamos Bisgliginato de Zinc, ya que debido a su forma química maximiza la capacidad suplementaria; una molécula de Zinc está unida a dos moléculas de Glicina, lo que ayuda a que el organismo lo absorba de manera muy eficiente.
La Glicina es un aminoácido que, además de sus propiedades calmantes, tiene entre sus varias funciones la capacidad de actuar como potente antiácido en el sistema digestivo. Es justamente esta propiedad la que logra que, al estar unido el Zinc a dos de estas moléculas (por eso el nombre Bisglicinato), la absorción sea considerablemente mejor que la de los formatos habituales de Zinc en suplementos (28, 29).
Estudios demuestran que al ser consumido como Bisglicinato, los niveles de Zinc a nivel plasmático aumentan a las pocas semanas, asegurando que su aporte funcional sea constante (1, 2).
En un pequeño estudio realizado con 12 mujeres suplementadas por algunas semanas con bisglicinato o gluconato, se encontró que aquellas que ingirieron bisglicinato de Zinc tuvieron un aumento de un 43,4% de biodisponibilidad del mineral en comparación con el gluconato (1).
En otro proceso investigativo también realizado con mujeres voluntarias, se estudió la biodisponibilidad de 4 tipos de suplementos, entre ellos óxido, picolinato, gluconato y glicinato de Zinc.
Los resultados indican que el compuesto que más aumentó la cantidad de Zinc en el plasma fue el glicinato, mientras que el que menos cambios mostró fue el óxido de Zinc, formato altamente utilizado en la industria (2).
Publicaciones de interés
1. A Review of Micronutrients and the Immune System–Working in Harmony to Reduce the Risk of Infection.
Autores: Adrian F. Gombart, Adeline Pierre and Silvia Maggini. 2020
En esta revisión publicada en el 2020 indican que los micronutrientes, entre ellos el Zinc, son una parte esencial para que el sistema inmunológico funcione de forma eficaz y desempeñe sus funciones vitales.
Para que estos micronutrientes colaboren en el sistema inmunológico deben ser ingeridos en cantidades adecuadas, lo que actualmente conocemos como las RDA o ingesta dietaria recomendada (por sus siglas en inglés).
Sin embargo, lo que se ha estudiado y lo que esta revisión indica es que esas cantidades no se han adaptado a los verdaderos requerimientos de micronutrientes para que tengan la capacidad de afectar positivamente a la función inmunológica, las recomendaciones dietarias deberían ser mayores.
El déficit de micronutrientes se ve en gran parte de la población mundial y se dice que incluso con pequeñas carencias, el sistema inmunológico se ve negativamente afectado, dejando al organismo predispuesto a infecciones y enfermedades.
Los científicos participantes de esta revisión indican que como existe una brecha entre la ingesta dietética de micronutrientes y una función inmune óptima, podría ser beneficiosa la suplementación de vitaminas y minerales. Destacan también la importancia de una suplementación segura, dentro de los límites recomendados, esto es, sin superar la UL o nivel máximo de ingestión tolerable en todos los rangos etarios pero especialmente en grupos considerados de riesgo como niños y embarazadas.
2. Zinc levels in seminal plasma and their correlation with male infertility: A systematic review and meta-analysis
Autores: Jiang Zhao, Xingyou Dong, Xiaoyan Hu, Zhou Long, Liang Wang, Qian Liu, Bishao Sun, Qingqing Wang, Qingjian Wu, Longkun Lia.
En este meta-análisis de 20 publicaciones, se investigó la asociación entre el Zinc y la infertilidad masculina en 2.600 pacientes infértiles y 867 individuos sanos. El análisis confirmó que los pacientes tenían niveles de Zinc menores en su semen comparado con los individuos sanos.
La suplementación con Zinc resultó en un aumento del volumen de eyaculación, vitalidad de la esperma, porcentaje de esperma normal y la calidad de la esperma en el semen de manera significativa. Estos resultados de la investigación sugieren que la suplementación con Zinc podría aumentar la función reproductiva en hombres.
3. Comparison of Four Commercially Available Zinc Supplements for Performance in a Zinc Tolerance Test
Autores: Robert A DiSilvestro, Melinda Swan. 2008
En este estudio se comparó la biodisponibilidad del óxido, picolinato, gluconato y glicinato de Zinc en una muestra de 12 mujeres adultas. Para esto se utilizaron dos mediciones:
- Medición 1; prueba de tolerancia de Zinc. En esta medición se observó cómo el Zinc en el plasma variaba cada hora durante 4 horas después de administrada la dosis.
- Medición 2: relación entre el Zinc de eritrocitos y la actividad enzimática de Zinc 5 nucleotidasa por 4 horas.
Los resultados de la primera medición indicaron que la mejor biodisponiblidad la tiene el Glicinato, seguido por el gluconato y compartiendo el último lugar el óxido y picolinato. En la segunda medición el glicinato continuó en el primer lugar, pero en ese caso, fue seguido por el picolinato, el óxido y en último lugar el gluconato.
Este estudio concluye y evidencia que el Glicinato de Zinc es el suplemento con mejor absorción de los 4 analizados.
Referencias
1. A bioavailability study comparing two oral formulations containing zinc (Zn bis-glycinate vs. Zn gluconate) after a single administration to twelve healthy female volunteers
2. Comparison of Four Commercially Available Zinc Supplements for Performance in a Zinc Tolerance Test
3. A Review of Micronutrients and the Immune System–Working in Harmony to Reduce the Risk of Infection
4. Contribution of selected vitamins and trace elements to immune function
5. Zinc and immune function: the biological basis of altered resistance to infection
6. Efficacy of zinc against common cold viruses: an overview
7. Zinc in wound healing: theoretical, experimental, and clinical aspects
8. Dietary Intake of Antioxidants and Risk of Age-Related Macular Degeneration
9. A Randomized, Placebo-Controlled, Clinical Trial of High-Dose Supplementation With Vitamins C and E, Beta Carotene, and Zinc for Age-Related Macular Degeneration and Vision Loss
10. The Role of Zinc in Growth and Cell Proliferation
11. Zinc and the gene
12. Antibacterial activity of three zinc-terephthalate MOFs and its relation to their structural features
13. The Essential Toxin: Impact of Zinc on Human Health
14. Effect of preventive zinc supplementation on linear growth in children under 5 years of age in developing countries: a meta-analysis of studies for input to the lives saved tool
15. The relationship between zinc intake and growth in children aged 1–8 years: a systematic review and meta-analysis
16. The Role of Zinc in the Treatment of Taste Disorders
17. Zinc and Taste Disturbances in Older Adults: A Review of the Literature
18. Zinc as a Gatekeeper of Immune Function
19. Diet and Immune Function
20. The key role of zinc in elderly immunity: A possible approach in the COVID-19 crisis
21. COVID-19 pandemic: Can zinc supplementation provide an additional shield against the infection?
22. The Implications of Zinc Therapy in Combating the COVID-19 Global Pandemic
23. Zinc and skin health: overview of physiology and pharmacology
24. The role of zinc in the treatment of acne: A review of the literature
25. Serum zinc levels and efficacy of zinc treatment in acne vulgaris: A systematic review and meta-analysis
26. National Health and Nutrition Examination Survey, NHANES.
27. Dietary Reference Intakes for Vitamin A, Vitamin K, Arsenic, Boron, Chromium, Copper, Iodine, Iron, Manganese, Molybdenum, Nickel, Silicon, Vanadium, and Zinc.
28. La glicina: un nutriente antioxidante protector celular
29. Comparison of zinc bisglycinate chelate and zinc oxide in vitro
31. Decreased copper and zinc in sera of Chinese vitiligo patients: A meta-analysis
32. Zinc in Alzheimer's Disease: A Meta-Analysis of Serum, Plasma, and Cerebrospinal Fluid Studies
33. Effects of zinc supplementation on diabetes mellitus: a systematic review and meta-analysis